Después de la batalla con Katharine, la rebelión yace hecha jirones. La maldición de la legión de Jules se ha desatado, dejándola fuera de su mente y no apta para gobernar. Arsinoe debe encontrar una cura, incluso cuando la responsabilidad de detener la neblina devastadora recae sobre sus hombros, y solo sobre sus hombros. Mirabella ha desaparecido. El gobierno de la reina Katharine sobre Fennbirn permanece intacto por ahora, pero a un coste personal enorme. El ataque a la rebelión tuvo un alto precio: su amado Pietyr. Sin él, ¿en quién puede confiar cuando llegue Mirabella, aparentemente bajo una bandera de tregua?
Mientras el más viejo y el más joven cierran el círculo, y Katharine comienza a anhelar la cercanía que comparten Mirabella y Arsinoe, las reinas muertas susurran: no se puede confiar en Mirabella. El destino de la isla está en manos de sus reinas. En esta conclusión de la serie Tres Coronas Oscuras, las tres hermanas se levantarán para luchar mientras se revelan los secretos de la historia de Fennbirn. Las lealtades cambiarán. Los lazos se pondrán a prueba y algunos se romperán para siempre.